lunes, 16 de mayo de 2011

TEXTO: EL PROCESO DE SOCIALIZACIÓN

 La socialización puede definirse como la incorporación del individuo a la sociedad, implicando ésto un desarrollo de unas características comunes en la personalidad de los individuos.
  Toda sociedad necesita de unos mecanismos de reproducción social como son: el control social y la adscripción identitaria. El control social implica la existencia de un conjunto de normas que regulen la convivencia. Un sujeto siente la necesidad de ser aceptado por el grupo al cual pertenece, de ahí que se someta a los mecanismos de control. En muchas ocasiones el individuo se ve obligado a someterse al control social para no sentirse ridiculizado por los demás y no ser etiquetado como el "raro". A todo ello la cuestión que me planteo es: "¿siempre que una persona   no se somete a lo establecido por el control social se le puede tachar de "anormal"?. En numerosas ocasiones, lo que en un principio parecía "lo raro" ha llegado a ser una cosa "normal", bajo mi punto de vista todo depende de que lo que comienza siendo ejecutado por una minoría sea aceptado por la mayoría.
  En el texto se hace referencia a la teoría de los roles, dentro de la sociedad los roles son cada uno de los papeles que interpretan los individuos, claro está que aunque dos personas tengan el mismo rol, no implica que ambos ejerzan dichos roles de la misma forma.
  El ejercicio de los roles lleva asociado una dimensión emocional que es lo que construye la identidad del individuo. Es decir, si a un menor, por ejemplo, desde que es un niño se le atribuye el rol de delincuente sin trasmitirle que eso puede cambiar, llegará un momento en el que el niño acabará sintiéndose delincuente. 
  Los rituales de paso se destacan en el texto como mecanismos de control social y como mecanismos que han servido para el cambio de rol. Lo rituales han sido extremadamente explotados por las religiones, intentando siempre dotar al individuo de una nueva identidad adaptada a la nueva organización social.
  Un individuo a lo largo de toda su vida va a ejercer numerosos roles de forma simultánea, por lo que no puede desarrollar roles que sean totalmente opuestos, puesto que generaría en él un conflicto.
  Uno de los principales agentes de socialización primaria es la escuela, en la cual hay que evitar el atribuir etiquetas, ya que si un profesor no confía en que el alumno va a esforzarse y aprobar el alumno no lo hará, al igual que pasaba con el ejemplo que he puesto arriba. Esto es aplicable a nuestra tarea como educadores sociales, debemos siempre confiar en la posibilidad de cambio de la persona. 
  Otra aportación importante que se debe destacar, es que los educadores sociales pueden llegar a tomar una postura poco autoritaria ante los jóvenes principalmente. Este hecho constituye un error puesto que, no hay que ejercer la educación social desde la imposición de normas, conductas...etc pero tampoco hay que olvidar que el educador social es el profesional y el jóven es el "usuario", en este caso. El "usuario nunca va a ser nuestro amigo", la relación que se establezca entre ambos tiene que ser fluida y amena pero siempre sin olvidar los roles que cada uno ejerce.
 La función del educador social va estar muy determinada por los efectos derivados de la socialización primaria en la persona. A parte de la escuela, la familia juega un papel muy importante y personalmente considero que el éxito de esta socialización en el sujeto va a depender mucho de los padres que haya tenido como referente. El educador social deberá realizar su intervención desde la prevención y la detección de cualquier tipo de disfunciones derivadas de una socialización primaria defectuosa, para así conseguir que en la socialización secundaria, el individuo ejerza sus roles de manera normalizada.



  




  

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